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CASA SOL Y SOMBRA
LOTE N° 233
La casa se manifiesta como una pieza abstracta y sobria en el paisaje. Una sombra nítida y definida sobre una topografía en suave declive, proyectada íntegramente en hormigón armado. Modulada a partir de una retícula de vigas y columnas, un volumen cuadrado de 600 m2 de techo plano contiene los diferentes espacios.
Su expresión sobria y compacta surge discretamente entre la vegetación del terreno. Dos muros de piedra de Ascochinga, situados en paralelo a la calle principal,delimitan el ingreso que conteniene la escalera que resuelve la transición entre la calle y la casa.
Plano de Planta
Al descender por una serie de bloques de granito dispuestos sobre el monte, surge una extensa pileta dispuesta tras las piedras naturales en el salto del lote que, con el solárium de césped natural, remata el recorrido.
A la derecha, un volumen revestido en piedra esconde en su espalda el ingreso de los vehículos que, al igual que la escalera, tensan las circulaciones y hacen de su recorrido una instancia de descubrimiento de la casa a medida que uno se acerca. Este cuerpo, enclavado en el monte, dispone de espacio para tres autos, lugar de guardado y un baño de servicio.
En el centro de la casa se encuentra un patio, que resuelve la situación de acceso y enmarca la vista lejana que atraviesa la vivienda. Una pérgola de madera tamiza la luz del norte y, en juego con las piedras naturales tocadas por la vegetación, proponen una nueva situación de vínculo con lo natural.
El descenso supone acompañar la suave pendiente del terreno: a medida que se avanza, pequeños escalones acompañan el recorrido. Mientras el techo se mantiene plano, la altura varía conforme su ubicación y uso jerarquizando cada área.
El área social comprende un gran espacio que integra la sala de estar, el comedor y una extensa cocina lineal situada en uno de los laterales de la casa. A continuación de la cocina, se disponen los ambientes de servicio (con despensa y tender cubierto) y un asador para uso interior. La sala de estar y el comedor se expanden con ventanas de piso a techo hacia una galería con parrilla y ambos espacios conviven con otra galería hacia el lateral, donde crecen plantas. Se trata de un lugar de contemplación que media la transición entre la casa y el terreno donde se implanta, mientras acoge las diferencias de niveles.
En el área privada, está el dormitorio principal y otros dos dormitorios secundarios. Vestidor y baño con antebaño se iluminan cenitalmente previo al dormitorio con grandes aberturas.
Las habitaciones de huéspedes (con baño privado) tienen la menor altura y su ubicación retirada de los espacios principales permiten inhabilitar el sector eventualmente.
La terminación cepillada de hormigón y los solados de placas de granito configuran ambientes sobrios, en los que los muebles y revestimientos en roble americano se completan con el verde exterior que cobra presencia gracias a las grandes ventanas perimetrales.